Ir al contenido principal

Cuando la curiosidad extrema es el problema

Estaba leyendo este libro porque es del MIT y no porque me guste la temática, que suele el target de personas de la peor calaña motivacionista, y dios me libre de caer ahí. Tampoco es que este post vaya sobre el libro, que empieza bastante flojo y se empeña en crear un extraño halo de misticismo sobre la curiosidad que no es de mi agrado.
 

"Si se quedan quietos se van a quedar atrás"

Y es que ya no queda nadie alrededor. Los años pasan y lo que empezó siendo un hobbie termina siendo un serio problema, muy tuyo y muy personal. La curiosidad es innata, aunque sufra un retroceso durante en el colegio en el que la enfocas más en la destrucción de su infraestructura que de aprender del aburrimiento que desprende el profesor. Por suerte, sí que se puede corregir el rumbo y reorientarla; sobre todo si vas a la Universidad dónde la mente te explotará en mil fragmentos que permanecerán contigo para siempre. Allí no lees sobre física ni sobre cuántica, no, allí resuelves ecuaciones de Schrödinger solo por aprobar exámenes. En unos años todo te sonará y le habrás perdido el respeto a textos que en otra época serían un serio dolor de cabeza. 

Una vez que aprendes sobre algo, el siguiente ladrillo va encima del anterior, así hasta contruyes un muro que al único que acabará encerrando dentro es a ti mismo. Porque la curiosidad es un espectro, y a su derecha se vuelve insano, siniestro y un tanto solitario. Tu humor cínico ya ni se entiende, que pa qué y cómo no, si tu solo ya te ríes del chiste con una sonrisa gamberra que con frecuencia deriva en un "¿me estás vacilando?"... Ay, dios.

Sí que existe mucha gente curiosa, cada una construyendo su particular muro y con los siempre es estimulante y divertido pasar el rato. Pero los muros no se construyen solos y, al final del día, el pintor se va a sus cuadros, el escritor a su novela, el músico a ensayar y el científico a perseguir citas. Todos ellos con sus característicos periodos de desaparición, —Hasta otra—dicen, y puede que en unos años nos volvamos a cruzar. O no.

Y poco más. Que estoy por quitarme de esto (de perseguir curiosidades); que cien páginas de ficción se me hacen mucho más arduas que cien de no ficción; que mi tara es evidente y que volveré a recaer, también; que he dejado el café y que la semana que viene dejo de fumar. Ah, y que nada más que añadir, su Señoría. Hasta otra.

Entradas populares de este blog

Texto para nadie

¿Qué sentido tiene continuar? Podría hacer una enorme bola de papel con todos los escritos y encestarlos en la basura, sin importarme que nadie vuelva a encontrarme; y borrar toda huella digital de aquello que una vez fue escrito, pensado, narrado o versado.  Borrar. Toda. Huella.  De principio a fin. Y que nadie sepa dónde me fui, si empecé de cero, me arrepentí o desaparecí para siempre. Que sólo quede la duda sobre mi alter ego y no yo. Y que este texto sea lo último que se supo. Sin despedidas. De nadie a nadie.

La mitología (Parte I)

Todo esto es un ejercicio mitológico sobre arrastrar cadáveres lo más lejos (¿in?)imaginable, y allá, dejarlos caer, en el transcurrir del final de los tiempos, término del trayecto, donde reside un abismo, en el que una leyenda sumergirá a la otra en océanos sin fondo, sin tiempo y sin latidos. Así que es, también, una epopeya entre dos leyendas. Y una batalla sin destino. [English version] Recita Música, que su alma es musa. Canta Musa, que (tu) alma será música. “Guerra traes y abismos serán (tu) eco: caídas de  Nuncas Sobrevives , laberintos de eternas melodías.” Poema .- Leyenda Música, ℵ Versos alevosos lanzados contra los muros de Troya. Lanzas de estrellas; ciclones de tormenta de fortalezas inundadas. Arcos de arena. Flores sin vida de almas sin cuerpo. Albas de flechas. Armaduras vacías. Fuegos sin danzas. Corazón es tu escudo, impenetrable; y frágil escudo de corazón; el tuyo. Es muerte la que dejas, y tu muerte la que pospones; leyenda de tus desiertos: corazón de torre...

La metamorfosis sobre el tiempo (SEPDT VII, Parte I)

Negar lo que somos mientras ocurre nuestra metamorfosis es negarnos en el tiempo. Pero olvídalo y empecemos desde el principio: sólo con el lenguaje como carga; que ya es muy pesada. [english version, here ] Ensayo Sobre La Escritura La historia que atraviesa este ensayo es la de una poeta que le escribía versos a nadie. Esta poetisa siempre supo el desenlace: que negada, permanecería; sola, versándole a nadie. Si diluviaba, que se inundase; que quedase destruido aquello que se interpusiera en su camino. Si estaba maldita, sería una maldición asignada, no suya. Nota.- Es un texto complejo y enorme; y esto es solo la primera parte. También es una continuación de "Sobre El Paso del Tiempo". La idea es perderse durante su lectura y dentro de sus pinturas, porque el significado está extrañamente entrelazado a nuestra percepción conjunta de ellas. Y es necesario perderse.  Nota 2.- Pienso y creo en cada párrafo escrito, no es un texto inconexo, quizá sí que es muy...